Hoy queremos dar a conocer una realidad que en muchas ocasiones pasa desapercibida fuera de nuestros círculos más cercanos; y es la de aquellos niños y niñas que, por circunstancias de salud, deben pasar largas temporadas hospitalizados o en sus domicilios.
Estos períodos se traducen en agendas repletas de citas diarias e interminables visitas a profesionales de diferentes especialidades; en un mismo día pueden tener pruebas en el servicio de cardiología y traumatología de un hospital por la mañana y estar yendo a dermatología y prueba del sueño en otro hospital por la tarde noche.
Por todo ello, queremos enviar nuestro agradecimiento y poner en valor el titánico esfuerzo que realizan cada día las familias por seguir mejorando su calidad de vida.